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LA CRUZ NEGRA - leyenda mendocina


Raymundo Palleres

 
 Por: Enrique Guerrero

  La Pampa del Sebo, que se extiende desde el río Mendoza en Luján de Cuyo, hasta el arroyo Anchayuya[1] de Tupungato, se tornaba cenagosa con las lluvias, de ahí su nombre, por lo que habitualmente había que cruzarla, con lentos carros tirados por bueyes.

Si se quería ir más rápido, la opción era el caballo o la mula, pero para que eso fuera posible, había que conocer caminos y atajos, o ser un baqueano como le decían y eso, ya no era para cualquiera.

Raymundo Palleres, poseía la fina capacidad que poseen unos pocos elegidos, para leer el campo y la huella; lo que sumado a su hombría de bien, lo habían convertido en el hombre de confianza, que Eugenio Bustos,  tenía en sus campos de San Carlos.

Tan pronto se lo podía encontrar, yendo por el Portillo a Chile, por la huella a la ciudad de Mendoza, o a dónde fuera que lo encomendaran.

Luego de que el terremoto del 20 de marzo de 1861, desbastara casi por completo la ciudad, comenzó a vérselo más seguido por esos rumbos.

La venta de productos del campo, cobros, adquisición de víveres y otros mandados, así lo exigían. 

Aquel día de 1864, según parece, emprendió el regreso con la tranquilidad de siempre, luego de cobrar una fuerte suma de dinero, que ocultó en unos bolsillos de la rastra[2].

Montaba una mula de un pelaje tan oscuro y profundo como el anochecer, seguido por el "tranquito" corto de otros mulares acollarados[3], que portaban provisiones.



  Algunos saben decir que el campo habla. Que un par de teros alborotados, una bandada de martinetas que se alza o el silencio repentino de las ranas, sapos o grillos, es señal de que algo pasa.

Vaya uno a saber que le confidenció a Raymundo aquel día. El hecho es que no se sabía solo y temiendo lo peor, colocó el dinero en la mula más baqueana y le dio una palmada en las ancassabiendo que se volvería a la estancia.

Los mulares cruzaron el arroyo La estacada[4], que nace de la confluencia del Anchayuya y el Guajardino[5], como almas que lleva el diablo.

Al otro día, cuando Eugenio Bustos encontró a los animales sin jinete y con todo el dinero en una de las alforjas, temió lo peor, por lo que le ordenó a su gente que salieran en la busqueda de Raymundo.

Tras seguir el rastro por unas leguas, lo encontraron tendido sobre el campo, cerca de un arroyo del Distrito Zapata.

Al parecer murió defendiéndose, en lo que debió ser una pelea despareja, si se tiene en cuenta que los años y la vida, lo habían vuelto diestro en el manejo del facón.

Cuentan que no lo enterraron allí. Al bordo del camino carretero, hicieron un túmulo[6], al que le colocaron una cruz  para identificar el lugar, como se acostumbraba.

El tiempo obró el resto. Los viajeros que por ahí pasaban, detenían sus carros o cabalgaduras y pedían protección para el viaje con alguna promesa, que en la medida que se cumplía, era pagada con otras cruces pequeñas u objetos, que mostraban su agradecimiento.

La Cruz Negra
Distrito Zapata, Tupungato.
Hasta que un día, levantaron una gran cruz pintada de negro y así, nació el paraje "La Cruz Negra"

Y fue a partir de ese momento, que Raymundo Palleres comenzó a transitar la huella profunda y silenciosa, que el paganismo le concede a la devoción popular, hasta convertirla en leyenda.


Latitud: 33°26'43.95"S

Longitud: 68°57'59.08"O

Altura: 891 m s.n.m.




Me despido con un abrazo y el deseo, de que pronto podamos recuperar la normalidad, que nos permita regresar a nuestras montañas.






Como llegar a la "Cruz Negra",
 con Google Maps



[1] Anchayuya: (quechua) compuesto por la voz ancha (adv): super, abundante, mucho), y llulla (mentira o engaño), por lo que anchallulla significa muy engañador o mentiroso, en alusión a las crecidas imprevistas que tiene el arroyo durante las lluvias. (estudio toponímico Huellas Cuyanas)

[2[ rastra o tirador: cinturón gaucho de cuero ancho, adornado con monedas de oro, plata o alpaca. Se lo llamó tirador o rastra, porque recordaba la rastra del arado. 

[3] La Estacada: el topónimo deriva por ser un arroyo pantanoso. Antiguamente se construyó una estacada o empalizada,  sobre la cual se tendió un puente de madera para efectuar el cruce sin peligro.  (toponimias de Juan Isidro Maza)


[4] acollarar: poner collar a un animal, unir por el cuello dos animales, de manera que marchen juntos. Unirse dos personas para vivir en pareja o contraer matrimonio.

[5] Arroyo Guajardino: nombre que recuerda al lenguaraz y baquiano Juan Antonio Guajardo, que actuara en la última época colonial, y también durante la actuación como gobernador intendente de Cuyo del general José de San Martín, sirviéndole de interprete en los parlamentos con los indios. (toponimias de Juan Isidro Maza)

 
[6] túmulo: montículo de arena o piedras con que algunos pueblos antiguos cubrían una tumba.

05 de agosto: DÍA DEL MONTAÑISTA

Grupo de senderismo "Rumbo Aconcagua"
fotografía: Jorge Bassi-Amalia Segovia


Hoy como todos los 05 de agosto, coincidiendo con el día de Nuestra Señora de las Nieves, se celebra el Día del Montañista.

Mientras buscaba una imagen representativa de nuestras montañas, entre varias, asomó una que se ajustó al mensaje que deseaba formular. Me la envió mi amigo Jorge Bassi y captaba una montaña de amigos y compañeros, con los que compartí senderos, anécdotas, paisajes y charlas.

Claro está, que en esta imagen no están todos, pero simboliza ese espíritu al que me refiero. Sintetiza claramente el popular refrán que nos convoca: “La montaña nos une”, y es a partir de esa unión, que se suman andinistas, senderistas, paisajistas, músicos y poetas; para admirarla, escalarla, recorrerla y cantarle.

Desde este humilde rincón, deseo saludar a los montañistas del mundo, dedicándole un especial reconocimiento, a todos los senderistas de nuestras montañas.


¡Feliz día del Montañista!




NUESTRA SEÑORA DE LAS NIEVES


Patrona y Protectora de las Actividades de Montaña

NUESTRA SEÑORA DE LAS NIEVES
Patrona y protectora de las actividades de montaña.

imagen de la Subsecretaria de Turismo de Mendoza (2018)

Hoy más que nunca, le pido a nuestra patrona, la Señora de las Nieves, que ilumine la mente y el corazón de los científicos, que buscan la cura al covid-19 y que bajo su protección, podamos retomar los senderos de nuestras  vidas.



Me despido con fuerte abrazo, deseándole a todos los lectores, senderistas y amigos, un feliz día.









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    (Puente del Inca)


EL FORTÍN PICHEUTA

Combate-de-Picheuta
"FORTÍN PICHEUTA"
Puesto Avanzado del Ejército de Los Andes


Latitud: S32 41.029
Longitud: W69 31.323
Altitud: 2030 m s.n.m.

Por: Enrique Guerrero.

Mientras íbamos por la RN 7, camino al solar histórico del fortín, pensaba que como desandábamos la historia, bien podía comenzar este relato diciendo:


- Aclaraba en el valle, cuando salimos por el Paso de Uspallata hacia el poniente y tras andar 4 leguas y media, llegamos al Picheuta...


Es que esta historia, que nace junto a un mástil pequeño, erigido sobre un pircado desprolijo, en un escenario donde el bermellón se instala con cierta insistencia en el paisaje, nos traslada a los comienzos de la Campaña Libertadora, del General José de San Martín.



EL SOLAR DEL "FORTÍN"


Llegamos hasta aquí, siguiendo un desvío de la RN7, que conduce al Puente de Picheuta, el que de acuerdo a crónicas de viajeros de esa época, 1817, aún no había sido construido.


Nos dio la bienvenida el sol luminoso y una brisa matinal, que desperezaba por momentos, el sueño oxidado de unos soldados de infantería, que avanzaban con sigilo.


Combtate-de-Picheuta
"La sorpresa de Picheuta"

Siluetas alegóricas, construidas en chapa y de tamaño natural, componen la escenografía perfecta, del momento histórico.


Tal iniciativa la llevaron adelante, los integrantes de "Las Águilas Libres Custom Club", al cumplirse el Bicentenario del Cruce de Los Andes (2017), significativo aporte, que puede apreciarse en varios hitos de la gesta Sanmartiniana.


Combtate-de-Picheuta
Llegando al "Fortín"


LA HISTORIA DEL FORTÍN


Luego de que el coronel José de San Martín, tomara posesión del cargo de Gobernador Intendente de Cuyo, a instancias de un decreto del Director Supremo Gervasio Posadas, crea en El Plumerillo, el "Batallón 11 de Infantería de Línea", el 08 de noviembre de 1814, constituyéndose a partir de ese momento, en la columna vertebral del Ejército de Los Andes.


A la vez que ordena establecer un puesto de observación adelantado, que alerte sobre posibles avances sobre el territorio nacional, del ejército realista, asentado en Chile.


Combtate-de-Picheuta
Vista hacia el oeste, desde el Fortín Picheuta.

La elección del teniente coronel de infantería de línea, Juan Gregorio de Las Heras, recae sobre un punto estratégico de la Ruta de Uspallata.


Una elevación sobre la margen oeste del arroyo Picheuta, sirve de atalaya por el amplio dominio visual que ofrece, a la vez que posee agua, para la dotación y animales.


Desde ahí se domina el camino que viene de Chile (oeste), río Mendoza (sur), el arroyo Picheuta y el camino que viene de Uspallata (este), con un único punto ciego, la accidentada quebrada del Picheuta (norte).


Cuando el general San Martín preparaba la invasión a Chile construyó aquí dos fuertes rústicos que proveyó de algunos cañones; los restos todavía pueden verse. Aquí también el Gobierno de Mendoza estaciona una guardia para examinar los pasaportes de los viajeros. Esta guardia permanece, generalmente, durante ocho meses y está formada por dos individuos que están expuestos a toda clase de privaciones, sin casa o refugio de ninguna especie para protegerse de los cortantes vientos que corren en este valle.

 "TRAVELS in CHILE AND LA PLATA", John Myers (1826).




LOS SUCESOS QUE LPRECEDIERON


El 15 de enero de 1817, el general San Martín le comunica al coronel de Las Heras, que ha sido designado para abrir la campaña por el Paso de Uspallata, ordenándole bajo palabra de honor, que guarde secreto.

 

Mientras tanto en Chile, el capitán general Francisco Marcó del Pont, le ordena al sargento mayor Miguel Marqueli, que efectúe un reconocimiento de la Ruta de Uspallata, para lo que le asigna un Destacamento de 250 hombres.



¡LA SORPRESA DE PICHEUTA!


El Fortín Picheuta, dependía del Batallón 11 de Infantería de Línea, conocido por el apelativo de, "Leones invencibles de Las Heras", con asiento natural en la localidad de Uspallata.


Combtate-de-Picheuta
FORTÍN PICHEUTA
Puesto Avanzado del Ejército de los Andes

Para las tareas de vigilancia y alerta, se había asignado un Pelotón de la Infantería de Línea.

 

La dotación estaba compuesta por un cabo de apellido Contreras, cinco soldados y ocho milicianos.

 

Ellos eran los encargados de llevar adelante, la "Misión de Sacrificio".



 Rojo  Columna Realista -  Azul  Guardia Patriota del Fortín Picheuta
(Carta de EUDE - Editorial Universitaria del Ejército Argentino)

Durante la madrugada del 24 de enero de 1817, Marqueli que había partido desde "Tambillitos" con una sección integrada por tres oficiales, cincuenta hombres y dos baqueanos, hace un rodeo ingresando por la quebrada de Picheuta y ataca por la retaguardia al fortín.


Al ser sorprendida la dotación y comprobar la superioridad numérica del enemigo, el cabo Contreras les ordena a algunos de sus hombres que se replieguen a Uspallata, para informarle al coronel Las Heras lo que está aconteciendo, mientras encara la defensa del puesto.

 

Luego de un breve combate, son tomados prisioneros, el cabo, dos soldados y cinco milicianos.


Combtate-de-Picheuta
Ruta Sanmartiniana, Arroyo de Picheuta
Enterado de la situación, Gregorio de Las Heras envía un Destacamento al mando del sargento mayor Enrique Martínez, compuesta por ochenta y tres hombres de la Compañía de Granaderos del Batallón 11, al mando de Francisco Aldao y treinta Granaderos a Caballo.

 

Los realistas se repliegan en Punta de Vacas, donde son alcanzados por Martínez.


Tras la batalla, la Compañía de Infantería de Línea, provoca el desbande y fuga de los realistas, obteniendo su primera victoria, en el Combate de Potrerillos, el 25 de enero de 1817.


Este y otros hechos menores, le sirvieron a San Martín, para comprobar la alta motivación y el espíritu de sacrificio, que se estaba gestando en sus tropas.


El Batallón 11 de Infantería de Línea, columna vertebral del Ejército de Los Andes, es el batallón más antiguo de Mendoza y la única unidad de Montaña del país, que combatió en la cordillera de Los Andes y en los países de Chile y Perú.




Combtate-de-Picheuta
Placa de la UNCuyo, sobre la margen este, del A° Picheuta.

Cuatro días después, el 29 de enero, el batallón comandado por el coronel Las Heras, acampa junto al arroyo Picheuta, ahora como 1ra División de Vanguardia del Ejército de Los Andes, continuado la marcha a Chile, el 30 de enero de 1817 a las 07,45 horas.





Tras la Campaña Libertadora de los Andes y a su regreso a la patria, el batallón presta servicio en varios destinos del país, hasta que en 1964, luego de estar asentado por más de 50 años en Rosario, regresa al terruño que lo vio nacer.


Batalla de Cucha Cucha
Escudo de Honor
Actualmente tiene su asiento en Tupungato, bajo la denominación de Regimiento de Infantería de Montaña 11 (RIM 11).

 

Lo identifica el escudo de Honor de Cucha Cucha, Chile (23 de febrero de 1814), batalla en la que combatió, siendo el primer destacamento de Auxiliares Argentinos, que bajo las órdenes del Coronel Balcarce y el Sargento Mayor Gregorio de Las Heras, se desempeñó fuera de los límites del territorio nacional.





Con tantos años de vida, no resulta extraño, por ejemplo, que haya tenido la primera banda musical militar, el día de su creación (01/08/1816), donada por un distinguido vecino de Mendoza, Don Rafael Vargas, hermano de Pedro Vargas, el gran espía de San Martín


Estaba integrada inicialmente por dieciséis músicos, esclavos libertos negros. La "Banda Militar Talcahuano"[1], tuvo el alto honor de participar en la Campaña Libertadora a Chile y Perú.


O que se afirme que entre sus filas estuvo el gaucho rebelde, que inspiró a José Hernández en su Martín Fierro (1872), claro que esas, esas son otras historias.


Dos fechas sanmartinianas para conmemorar este mes.


- 01 de agosto: creación del Ejército de los Andes (1816).


- 17 de agosto: paso a la inmortalidad del General, Don José Francisco de San Martín (1850).





Como siempre, me despido con un abrazo grande, deseando que la vida nos brinde, buenos senderos en el andar.









  



[1] Talcahuano: (tralkawenu, mapundungún), cielo tronador.


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CACHEUTA - leyenda mendocina

Cacheuta

Puente colgante de Cacheuta


Por: Enrique Guerrero.


Con el comienzo del periodo hispánico en América del Sur, los pueblos originarios se vieron desbordados por una violencia inusual.


La aparición de los ejércitos profesionales, las armas de fuego y el caballo, deslumbraron, atemorizaron, sometieron y exterminaron a las poblaciones naturales.


Esta leyenda nace en un periodo hispánico temprano, cuando el avance del conquistador sobre nuestro territorio es inminente, cuando sólo restan 29 años, para la fundación de Mendoza.




El último soberano inca


Es 1532 y Francisco Pizarro, se dirige con un ejército de ciento sesenta y ocho soldados y treinta y siete caballos, a la ciudad de Cajamarca, bajo pretexto de conocer a Atahualpa, cuando en realidad es llevado por el rumor de que allí, se concentran las riquezas del imperio inca.

Atahualpa -"Dichoso vencedor"
XIV Emperador (1532-1533)
Mientras tanto, Atahualpa[1] que acaba de arrebatarle el trono a su hermano Huáscar, tras una sangrienta guerra, le facilita la llegada a la región empujado por la curiosidad y desoyendo las advertencias de sus generales, que le sugieren exterminarlo.

 

El fatal encuentro se produce en la plaza de Cajamarca, cuando el emperador marcha con su séquito.

 

Un capellán español se aproxima al trono, con un crucifijo en una mano y la biblia en la otra, ordenándole que acepte el bautismo y la autoridad del rey Carlos I de España.
Al no comprender lo dicho por el español, arroja la biblia a un costado, ofreciéndole a Pizarro la excusa perfecta, para abrir fuego y comenzar una matanza, que culminará con su captura el 16 de noviembre de 1532 y el consiguiente desbande, de los generales incas.

"Cuarto de Rescate"
(Cajamarca - Perú)
A cambio de su libertad, ofrece llenar con oro, la habitación donde está cautivo, hasta la altura donde llega su brazo extendido.


Para ello movilizó a las cuatro regiones (suyus) del imperio, para que reunieran los metales necesarios, para pagar el rescate.



El cacique dixo que el les daria tanto oro como cabría en un apartado que alli estava hasta una raya blanca que alli estava, que un hombre alto no allegaba a ella con un palmo.

                                                             Cristóbal de Mena 1534


A la habitación donde estuvo prisionero, se la conoce como "El Cuarto del Rescate” y está ubicada en el jirón (calle), Amalia Puga 750, a cincuenta metros de la Plaza de Armas de Cajamarca.




Cacheuta


Leyenda huarpe  

Adaptación: Enrique Guerrero

Durante el siglo XV y principios del XVI, el Imperio Inca había expandido sus fronteras hacia los cuatro puntos cardinales o regiones, ejerciendo el dominio sobre las etnias preexistentes y un estricto sistema de gobierno, que imponía entre otras cosas, el uso de la lengua quechua y el pago del tributo.


Paisaje de Cacheuta y figura de un chasqui.

Luego de que el Sapa Inca[2] Atahualpa fuera capturado, la orden de reunir el oro para su rescate, corrió en boca de los chasquis por todo el imperio, llegando al extremo sur del Collasuyu, donde el cacique Cacheuta ejercía sus dominios.



La figura alta y delgada, cabeza alargada, cabello largo y cutis oscuro, acentuaban el carácter decidido que el dios Hunuc Huar, les había dado a todos sus descendientes, los huarpes.


Cacheuta, se encontraba establecido con un pequeño grupo de familias, en tierras cercanas al río.


Una tarde, el ladrido desenfadado de los perros, lo sacó de sus labores. La inesperada llegada de un chasqui, portando la orden de reunir oro para el rescate de Atahualpa, le impondría un gran desafío.


"Carmen Jofré"
carboncillo de Fidel Roig Matons

Su vida sedentaria y tranquila, se vio alterada por esta consigna, ya que sabía de agricultura, caza, pesca, cestería y riego, pero sus conocimientos sobre la minería, eran escasos.


No obstante, convocó a su gente para reunir el precioso metal, disperso en los arroyos y ríos andinos.


A medida que encontraban pepitas y piedras con restos de oro, las almacenaban en bolsas, confeccionadas con cueros del cogote del guanaco, para luego trasladarlas hasta Cajamarca, el Pueblo de las Espinas (quechua: Kasha: espina, Marka: pueblo).


Y así fueron transcurriendo los días. Pasó el verano primero, el otoño después y con la llegada del invierno, las bolsas con la preciosa carga, estuvieron dispuestas para ser transportadas al Perú.



Despuntaba el alba, cuando iniciaron el largo viaje. El gran peso del metal sobre sus espaldas, les impedía agilizar el paso y sólo los animaba el deseo de llegar al Qhapaq Ñan, camino que los conduciría al centro del Imperio Inca.


Río Mendoza, en la quebrada de Cacheuta.
Fue durante las primeras jornadas de marcha, que iban desde el "Valle de Huantata" hasta "Las Vertientes de Agua Caliente", que un malón de araucanos, enterados de la valiosa carga que transportaban, se emboscaron en una de las quebradas y los atacaron.

El cacique, viendo la superioridad enemiga y la indefensión de su gente, les pidió a sus hombres, que con un último esfuerzo ocultaran el oro de los malhechores.


La batalla fue breve. Cuando cayó el último de los hombres de Cacheuta, los araucanos dando gritos y alaridos de victoria, se entregaron a la búsqueda del metal, tarea que no les demandó mucho tiempo, por cuanto la tierra donde estaba enterrado, había sido removida recientemente.


Cuán grande sería su sorpresa, cuando luego de practicar un gran hoyo en el suelo, comenzaron a brotar poderosos chorros de agua caliente, que les cayeron encima, hasta exterminarlos.


Hay quienes dicen, que fue la justicia de Cacheuta, por las vidas cobradas ese día; otros, que fue Pachamama, indignada porque el oro estaba destinado al rescate, de uno de los hijos del sol: Atahualpa.


Lo cierto fue, que con el transcurrir de los años, el paraje heredó el nombre del valeroso cacique y hoy como testimonio de aquellas duras jornadas, las aguas termales continúan fluyendo, pero esta vez, con poderes sanadores.





Otras historias, mitos y ...


Como siempre, cuando ocurren hechos tan singulares como este, nacen otras historias, mitos y leyendas.


Hay quienes comentan, que cuando Cacheuta se encaminaba hacia el Qhapaq Ñam, un chasqui que corría por una de las veredas, le informó que los españoles le habían dado fin a Atahualpa, por lo que dispuso que los cueros con la pesada carga fueran abandonados en el lugar, para emprender el regreso a sus tierras.


Cueva en de la Quebrada de Cacheuta 2019

Y así nació el mito, sobre el posible destino del oro...


Hubo quien aseguraba, que fue enterrado cerca de unas vertientes de agua caliente, en la otra vera del río, frente a dos grandes rocas llamadas "Las Petacas"[3] y otros, que quedó abandonado en una cueva escondida de los alrededores.


No falta el que señala que años después, con la llegada de las encomiendas españolas, un huarpe le contó la historia a un cura encomendero y este, comenzó la búsqueda entre las "Aguas del Corral" y los "Baños de la Punta del Río" (denominaciones españolas de la zona), hasta que finalmente halló el tesoro y nunca más se supo de él.




El cautiverio de Atahualpa


Atahualpa estuvo preso 252 días, desde el miércoles 16 de noviembre de 1532, hasta el miércoles 26 de julio de 1533, fecha en que fue ejecutado.


Había reunido el oro de su rescate, no obstante, se le dio a elegir entre morir quemado en la hoguera sirviendo a su dios, o ahorcado, si se convertía al cristianismo, por lo que tras aceptar la segunda opción, fue bautizado con el nombre de Francisco.


A los cargos de conspiración, idolatría, fratricidio, poligamia, traición e incesto, se le agregó el de apóstata[4], por su última decisión.


Murió estrangulado en un  poste, ubicado en el centro de la plaza de Cajamarca.


Tras su muerte, comenzaba la caída del Imperio Inca.




Toponimia de CACHEUTA


"Los estudios toponímicos ya realizados en la lengua de nuestros naturales, no definen el significado del nombre Cacheuta, pero si tenemos en cuenta que los indios al hablar pronunciaban en forma separada las sílabas, encontramos que la palabra Cacheuta es compuesta de ca- che y uta, por lo que ca o ka, en lengua indígena de los indios huarpes e incaicos pertenece al adverbio otro u otra, che es gente o persona y uta es valle o lugar, por lo que el significado de Cacheuta sería: Otro de los valles o lugares donde se reúne la gente". 

Toponimias de Juan Isidro Maza.



Por otra parte, buscando en diccionarios del idioma Huarpe Millcayac y Allentiac, se puede encontrar la expresión: Cach uta (Milcayac) y Cach utu (Allentiac), cuyo significado es, "tu casa o lugar". Compuesto de "cach", tuyo y "uta o utu", casa o lugar, respectivamente.




Con el deseo que hayan disfrutado de la leyenda, me despido con un fuerte abrazo, esperanzado en que la vida, siempre nos brinde, buenos senderos para andar.





Como llegar al Puente Colgante,
 con Google Maps







[1] Atahualpa (ata-w wallpa): del idioma puquina, lengua usada por la nobleza inca.  Ata-w: señalado o elegido y wallpa: diligente, aplicado.

[2] Sapa Inca: supremo emperador del Tahuantinsuyo. Los cronistas cuentan que también era llamado Intipchurin, “hijo del Sol”.

[3] petaca (RAE): arca de cuero, o de madera o mimbres con cubierta de piel a propósito, para formar el tercio de la carga de una caballería. Se ha usado mucho en América.

[4] apóstata: persona que abandona sus ideales o su religión públicamente para seguir otros diferentes.




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* Cerro PUNTA NEGRA, leyenda mendocina.

* Leyenda del ACONCAGUA.

* Tambo incaico TAMBILLITOS.

Preservar el patrimonio cultural y las tradiciones, constituyen los únicos caminos posibles, para mantener vigente la historia de nuestros orígenes.


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